Las ticas ganaron su 14 título consecutivo, por puntos, después que quedaron empatadas con los sorpresivos equipos de Belice y El Salvador: cada uno con 4 victorias y una derrota, al final del torneo.

Al fin de los cálculos estadísticos, Costa Rica ganó oro, Belice le tocó plata, y a El Salvador le quedó el bronce. Fue una sorprendente hazaña para Belice, de subir a sub-campeón, después de quedar en séptimo lugar en el último torneo en 2014.

Miembros del comité directivo de la Asociación de Voleibol de Belice (BVA) presentaron los premios individuales a las mejores jugadoras; su presidente, Allan Sharp, presentó el premio de la Jugadora Más Valiosa (MVP) a Yuliana González de Costa Rica, quien también se llevó los premios de Mejor Servicio y la segunda Mejor Atacante.

Belice se llevó cuatro premios; Sherika Burton ganó los premios de Mejor Atacante – 86 ataques, y Mejor Anotadora – 96 puntos. Shantell Arnold fue premiada como la Mejor Opuesta, anotando 68 puntos: 48 remates, 13 bloqueos y 7 saques; y Karen Quan fue la Mejor Colocadora.

Josafat Díaz de Nicaragua ganó el premio de Mejor Bloqueo – 18 bloqueos, Astrid González de Guatemala la segunda Mejor Bloqueo - 14 bloqueos, y Laura Quiñonez, también de Guatemala, ganó los premios de Mejor Libero y Mejor Defensa. Kathya Vasquez de El Salvador fue reconocida como Mejor Receptora.

Las campeonas, sub-campeon y tercer lugar recibieron trofeos por el equipo y medallas individuales.